El guardián invisible de Dolores Redondo es la última novela que he leído. Reconozco que no soy aficionada a la novela negra pero tenía una deuda pendiente con esta escritora.
El libro no me ha defraudado, desde el primer momento te mantiene en tensión, a lo largo del relato se mezclan tradiciones y traiciones, creencias ancestrales, mitologías de brujas, señores protectores del bosque, secretos familiares, envidias, celos y traumas sin resolver.
El hilo conductor de la novela es la investigación del asesinato de varias adolescentes en el Valle del Baztán, un hecho que altera la vida de sus habitantes y de la inspectora Amaia Salazar, jefa de la investigación, que vuelve a su localidad natal Elizondo para detener al asesino y enfrentarse a sus propios miedos aún sin resolver.